Y se ganó.

El barça demostró ayer que no depende de Ronaldinho, si bien es cierto que sus compañeros se acordaron de él.
Messi estuvo espectacular, una vez más. Marco los dos tantos del Barcelona, ante un Sevilla algo desconocido.

La defensa del barça parece que ha mejorado, aunque con la entrada al campo de Oleguer, y tras un fallo suyo, llego el 2-1.

En el partido se hicieron patentes las dificultades que presenta el barça para marcar gol, y eso que al inicio de la temporada todo apuntaba a que sería una maquina de hacer goles. Henry sigue algo lento y con poca suerte de cara al gol, otra vez dio al palo y ya van tres en cuatro partidos. Marquez, no esta en su mejor momento. Pero el nuevo barça cuenta con Abidal y Toure, dos jugadores que estan demostrando una gran calidad. Y como no, Messi. Ese pequeño gran hombre que consigue que el Campo Nou se ponga en pié y coree su nombre.